martes, 12 de abril de 2011

Los zapatos rojos

Puedes pasarte mucho tiempo planificando hacer algo, y no decidirte. Darle vueltas a cómo cambiar la imagen o redirigir un proyecto, pero no llegar a ninguna conclusión. Y es que resulta que a veces es el propio proyecto el que necesita madurar solo en su propio capullo para florecer en el momento preciso. Hace poco escribí para el suplemento Cultural de El País de Montevideo un artículo que comenzaba así...

"Tener un blog es como tener una planta. Un día sembrás las semillitas y elegís un lindo macetero que combine con los colores que tendrá tu planta cuando florezca. Entrás en blogspot o wordpress y "en solo tres pasos" -como reza en la home de algunos de estos sitios- tenés una página con tu nombre, tu fotito y una plantilla básica. El primer post se lo mandas a tu madre, lo publicás en tu muro de Facebook y todo el mundo te aplaude. Luego, el blog es una hoja verde más que navega a la deriva en el mar 2.0. No aburrirse de regarlo a diario y mantener un buen número de comentarios no es nada fácil..." (Tontos 2.0, El País Cultural)

Además del comienzo de una crítica a un libro supongo que esto era, en cierto modo, mi disculpa a mi pequeño grupo de seguidores por la sequía que sufría conQdecaja. Hace casi un año mi vida giro en 180º y el blog se quedó atrapado en la lista de "cosas por sacar de la maleta". Todo había cambiado desde que
abrí conQdecaja, pero tampoco encontraba la nueva dirección que quería que tomara. Me preguntaba: ¿Qué le/me faltaba? ¿Más luz, agua o más sales minerales? Quizás sólo necesitaba -como cualquier organismo vivo-, tiempo para madurar. Tiempo para que un día de mierda del mes de abril termine con un par de zapatos rojos en una caja, un cuento envuelto en papel de regalo y la convicción de que es necesario cultivar tu propio estilo para evitar que la mediocridad terminen por oxidar tu curiosidad.

Así que llegó la hora de sacar los zapatos rojos de la caja y mirar dentro de ella para ver, nuevamente, qué más contenidos culturales y artísticos se salen de la caja. Yo aún no lo sé.

... A los que quedéis por aquí después de tanto silencio, gracias por esperar :)

Foto: San-Wau!

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