lunes, 2 de noviembre de 2015
domingo, 6 de septiembre de 2015
jueves, 27 de agosto de 2015
El gato salvaje vino a por mimos
El cuadro de la derecha lo pintó la abuela. Es uno de los invernaderos de Santa Teresa. Y cuando me lo regalo, me dijo: "Para que siempre tengas un recuerdo del tiempo maravilloso y toda la gente buena que encontraste en Uruguay". El árbol de metal lo compramos en una excursión a Ikea con Marta y David, mis compis de piso en Madrid. Ahora ella debe estar defendiendo su tesis predoctoral con un bebé dentro de la panza. La flor naranja me la regaló Nico, un francés de esos amigos-casi-hermanos con el que vivía en Holanda. Las estrellas de la ventana vinieron de Barcelona hace por lo menos 6 años, y en la foto a lo lejos se nos ve a mi hermano y a mí en alguno de esos eternos veranos de vacaciones en la playa. La compu tiene teclado francés, y aunque Gregor tenga pasaporte europeo, es montevideano. En la pantalla, una memoire a medio hacer sobre valores de la cultura digital, espacios públicos, jóvenes e interculturalidad.
No existe el tiempo, ni presente ni pasado.
El tiempo no es más que una suma subjetiva de recuerdos.
lunes, 17 de agosto de 2015
Exiliarse del exilio de Internet
¿Se acuerdan de cuando preguntábamos por Twitter si nos cortábamos el pelo o no?
¿De cuando compartíamos que el día había sido una mierda por culpa de tu jefe?
¿De cuando hacíamos check-in en Foursquare porque nadie vivía en tu ciudad?
Y ahora que sabemos quienes somos y que aquellos saben dónde encontrarnos... ¿a dónde vamos?
¿Dónde se exilia una cuando el lugar de exilio ha sido también ocupado?
Apertura y reconquista, apertura y reconquista. En eso consiste. Y así es como seguimos avanzando. Algunos soñando con el exilio, y otros ocupando nuestros espacios para volver a atarnos los pies a la tierra.
Exilio, "extimité", autocontrol... y en el camino quizás nos quedemos vacíos de palabras
¿Me corto o no me corto el pelo?
"Un perro andaluz", Luis Buñuel |
lunes, 13 de julio de 2015
Parc des Buttes-Chaumont
miércoles, 24 de junio de 2015
Como si vivieras en París todos los días de tu vida
10 rincones random o/y pequeñas recomendaciones para disfrutar de París como si vivieras en ella todos los días de tu vida :
1. Visita la Ciudad Universitaria:
Es un campus internacional en el borde sur de la ciudad con un hermoso parque y casas por países al estilo Harry Potter. Perfecto para ir a hacer un picnic, salir a correr o jugar a la petanca (así es españoles, ni París ni Uruguay este es un deporte de viejos).
2. Petit Palais :
Al encontrarse al lado del Gran Palais, que siempre cuenta con exposiciones multitudinarias parece que este edificio quedara un poco relegado a segundo plano. A veces tiene alguna exposición interesante, aunque en esta lista voy a señalar sólo dos cosas. El cuadro "Les Halles" de Léon Lhermitte que se encuentra casi al final de la exposición permanente (siempre gratuita), y el jardín interior donde se encuentra la cafetería.
3. Crepes bretones :
En lugar de comer cualquier cosa con nutella por encima que encuentres en el Quartier Latin, mejor visita una de las creperías auténticamente bretonas en la calle Montparnasse, efectivamente, junto a la torre de Montparnasse. La explicación de la masificación de creperías en esa zona (según me contó una bretona) es que a esta estación es justamente donde llegaban los trenes dirigidos a la Bretaña francesa, lugar de donde son originales los crepes.
4. Café :
Café gourmand, svp.
Simplemente, eso.
5. La Recyclerie :
Una cafetería / resto / centro cultural creado en una antigua estación de tren. El lugar es mágico, y tiene una zona junto a las antiguas vías de tren con un pequeño huerto, gallinas, cabras y plantas aromáticas. Los fines de semana suelen tener mercadilos de segunda mano, brunch y una gran cantidad de actividades. Además, se encuentra junto al Marché aux Puces de Saint-Ouen.
6. Monaco :
Uno de los cockteles con cerveza más famosos, es una mezcla de granadina, limonada y cerveza. Muy azucarado, pero refrescante
7. Picnic :
En lugar de hacerlo bajo la Torre Eiffel o el jardín de Invalides, mejor ver atardecer junto al Sena en el Quai de la Rapée o el Quai Saint-Bernard. Además, muchas noches hay pequeños conciertos o bailes en los anfiteatros de este segundo quai.
8. La Butte aux Cailles :
Construido sobre una colina de piedra caliza, este barrio es un pequeño pueblo en el centro de París. Además de ser una zona famosa por sus bares, graffitis y restaurantes, creo que vale la pena perderse por sus calles a la luz de día y descubrir las casitas con jardín escondidas.
9. Le marché du dimanche :
Compra quesos y flores en los mercaditos callejeros del domingo.
10. La BPI :
El Centro Pompidou tiene una magnífica biblioteca / mediateca de 3 o 4 plantas que vale la pena visitar. El acceso es por la calle de atrás, justamente opuesto a la gran plaza por la que se accede al museo.
1. Visita la Ciudad Universitaria:
Es un campus internacional en el borde sur de la ciudad con un hermoso parque y casas por países al estilo Harry Potter. Perfecto para ir a hacer un picnic, salir a correr o jugar a la petanca (así es españoles, ni París ni Uruguay este es un deporte de viejos).
2. Petit Palais :
Al encontrarse al lado del Gran Palais, que siempre cuenta con exposiciones multitudinarias parece que este edificio quedara un poco relegado a segundo plano. A veces tiene alguna exposición interesante, aunque en esta lista voy a señalar sólo dos cosas. El cuadro "Les Halles" de Léon Lhermitte que se encuentra casi al final de la exposición permanente (siempre gratuita), y el jardín interior donde se encuentra la cafetería.
3. Crepes bretones :
En lugar de comer cualquier cosa con nutella por encima que encuentres en el Quartier Latin, mejor visita una de las creperías auténticamente bretonas en la calle Montparnasse, efectivamente, junto a la torre de Montparnasse. La explicación de la masificación de creperías en esa zona (según me contó una bretona) es que a esta estación es justamente donde llegaban los trenes dirigidos a la Bretaña francesa, lugar de donde son originales los crepes.
4. Café :
Café gourmand, svp.
Simplemente, eso.
5. La Recyclerie :
Una cafetería / resto / centro cultural creado en una antigua estación de tren. El lugar es mágico, y tiene una zona junto a las antiguas vías de tren con un pequeño huerto, gallinas, cabras y plantas aromáticas. Los fines de semana suelen tener mercadilos de segunda mano, brunch y una gran cantidad de actividades. Además, se encuentra junto al Marché aux Puces de Saint-Ouen.
6. Monaco :
Uno de los cockteles con cerveza más famosos, es una mezcla de granadina, limonada y cerveza. Muy azucarado, pero refrescante
7. Picnic :
En lugar de hacerlo bajo la Torre Eiffel o el jardín de Invalides, mejor ver atardecer junto al Sena en el Quai de la Rapée o el Quai Saint-Bernard. Además, muchas noches hay pequeños conciertos o bailes en los anfiteatros de este segundo quai.
8. La Butte aux Cailles :
Construido sobre una colina de piedra caliza, este barrio es un pequeño pueblo en el centro de París. Además de ser una zona famosa por sus bares, graffitis y restaurantes, creo que vale la pena perderse por sus calles a la luz de día y descubrir las casitas con jardín escondidas.
9. Le marché du dimanche :
Compra quesos y flores en los mercaditos callejeros del domingo.
10. La BPI :
El Centro Pompidou tiene una magnífica biblioteca / mediateca de 3 o 4 plantas que vale la pena visitar. El acceso es por la calle de atrás, justamente opuesto a la gran plaza por la que se accede al museo.
lunes, 25 de mayo de 2015
lunes, 11 de mayo de 2015
domingo, 26 de abril de 2015
domingo, 15 de marzo de 2015
Gregor Samsa despierta del invierno
Paris se despierta del invierno. La luz comienza a filtrarse entre las nubes, hace sol incluso. Y en ventana la planta de margarita empieza a florecer. Junto a ella el aloe vera sobrevive a las mordidas de Gregor Samsa.
Gregor Samsa es tan familiar para mí que todo aquello que lleve su nombre me toca profundamente. Gregor es nuestro gato, es una grupo, es la obra de Elián Stolarsky en el Subte, es nuestra propia vida en transformación. Es todo aquello y aquellos que en algún punto se vieron transformados por Kafka.
A continuación un rejunte de algunos de esos gregorios para despertar el domingo, para despertar del invierno:
1. Gregor Samsa (el grupo): Una de mis últimas obsesiones musicales
2. Edward Watson interpretando a Gregor Samsa para la adaptación de la obra del
The Royal Ballet. La coreografía es de Arthur Pita y pudo verse en el escenario entre 2012 y 2013. Para conocer un poco más de la obra y ver el trailer, por aquí.
3. Un fragmento de "Kafka-Samsa. Reality Through Symbolism", un texto de Robbie Batson publicado en The Kafka project. Completo, aquí:
"It is unusual to say the least to open a book and the first line is about the main character waking up as a large insect. Most authors’ use symbolism to relate the theme of their work, not Franz Kafka. He uses a writing method that voids all aspects and elements of the story that defy interpretation. In doing this, he leaves a simple story that stands only for an objective view for his own thoughts and dreams. Kafka focuses the readers’ attention on a single character that symbolizes himself and his life, not Everyman as some authors do..."
4. Gregor Samsa es también un tema de Alberto Arteta Group:
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